En agosto de 2014 publicábamos un par de entradas relativas al tema musical de Madness ´(My name is) Michael Caine´, que además se encuentran entre las últimas publicaciones antes de este pequeño «impasse» de un año en el que nos fue imposible mantener actualizado el blog. Estas entradas supusieron algo más de investigación de la habitual, y la curiosidad trascendió más allá del propio texto, llevándonos a buscar fuentes de primer orden para saciar el ansia por resolver enigmas (TODOS LOCOS).
Dichas publicaciones surgieron a raíz de un tema de la banda británica que «homenajeaba», de algún modo, al actor Michael Caine, con la disculpa de una canción.
A cuento de esta idea de Madness, y dudando de que la casualidad formara parte del «plan», la banda gallega Siniestro Total edita (¡digitalmente!) en junio de 2015 un EP que contiene un canción llamada ´Luis Tosar´.
Foto por David Garía-Amaya
una cifra bien impar,
nos presenta, ya lo ves,
¡al sin par don LUIS TOSAR!
Es la historia misteriosa
del encuentro con un doble
de personalidad esquizoide
e identidad más bien dudosa.
¿Quién no ha vivido alguna vez
tan inquietante historia?
¿Y quién no quiere tener
de LUIS TOSAR una dedicatoria?
Si tu nombre has olvidado,
¡este es tu tema, atontado!»
(Letra y música: Julián Hdez.)
Podría liarme a contar «mis movidas» sobre el significado de esta canción, como me ha dado por hacer en otras entradas, pero me parece mucho más adecuado tener la información fresca y de primera mano, así que vamos a integrar en esta entrada de la sección «Música y cine» un «Dr. Cine feat JULIÁN HDEZ.» (A.k.a. el padre de la criatura), y saber de verdad de dónde surge todo esto… o si es sólo un reflejo… (glubs)… Cedo la palabra al excelentísimo:
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UN MONSTRUO EN EL ESPEJO
A propósito de la canción Luis Tosar
Luis Tosar no es Luis Tosar: la persona -que también es personaje- no es el personaje -que nunca será persona. ¿O sí?
Luis Tosar, la canción, habla del doble, esto es, del Uno y del Otro Que También Es El Uno. Del Doppelgänger: el doble que camina a tu lado.
Y nuestro Luis Tosar no es Luis Tosar. Así como el Michael Caine de Madness tampoco es Michael Caine…
(Te jodes, Luis. Gracias, Luis. Te jodes, Michael. Gracias, Michael.)
En Luis Tosar, Luis Tosar se encuentra con ‘Luis Tosar’ y se queda perplejo:
Esa manera de mirar
la he visto yo en algún lugar,
esa voz tan peculiar
me resulta familiar…
Yo he visto a ese hombre
¿dónde? ¿cuándo?
No sé si es cosa mía…
¿una manía?
Pudo ser cualquier día,
uno de tantos,
mirando en un espejo
o en un charco.
La pregunta es inevitable:
¿Y si resultas ser una sombra
de otra sombra
en la pared?
Y llega el rechazo:
No, no lo digas, no quiero saber
que sin mí no hay tú,
que sin ti no hay yo.
Pero siempre hay una última esperanza:
Si algún día te vuelvo a encontrar,
si te vuelvo a ver,
o a escuchar tu voz,
Tal vez entonces me podrás decir
que soy yo quien soy,
que yo no soy quién.
Ahora dime cómo me llamo,
repite ese nombre otra vez.
Luis Tosar -la canción, insistimos, no el hombre- se refleja de lejos en el encuentro de Borges con Borges y en la esquizofrenia. Quizá también le deba algo a Julian Jaynes. Su libro El origen de la consciencia en la ruptura de la mente bicameral es teórico, vale, pero serviría como eco lejano para definir la canción. Nadie es uno ni trino; nadie es Dios: todo el mundo es Dos; todos somos –a veces, que no siempre somos tan complejos- bípedos con dos riñones, con dos ojos, dos orejas y –a veces, si las cosas se ponen así que tal- con dos tarjetas de plástico (una de crédito y otra de débito).
Husmeando por la discografía de Siniestro Total, no es la primera vez que aparece una idea semejante. En el álbum Country & Western (2010), la canción Mi amigo imaginario ya se ocupaba por estos problemas de identidad, ese desconcierto que tenemos todos desde las primeras veces que nos miramos asombrados en el espejo, perplejidad o miedo que intentamos camuflar con una impostada imaginación infantil:
Dime que yo no te inventé
Habla por favor
Dime que tú no me inventaste a mí
Habla por favor
Y rematando la jugada:
Todo sea por esta amistad
que nunca soñé tener
que nunca volveré a encontrar
La conclusión es que no hay nada nuevo bajo el sol. Si no la hubiéramos descubierto más tarde, la canción Monster in the mirror, de Barrio Sésamo, sería el antecedente inmediato de Luis Tosar, casi antes que la intención de emular a Madness. (Bueno, ¿qué pasa? Ellos tendrán a Michael Caine, un tipo de Londres, y nosotros tenemos a Luis Tosar, un tipo de Lugo. Qué, ¿alguien da más?)
En fin, dejemos la última palabra a Coco, el monstruo azul, en una auténtica obra maestra del desdoblamiento de personalidad:
Vi un monstruo en el espejo cuando desperté
Vi un monstruo en el espejo y no me escapé
No derramé una lágrima ni me escondí
Y eso que el monstruo me miraba y me dijo así:
Dijo: “Uaba, uaba, uaba, uaba, huhuhú
Uaba, uaba, uaba, uaba, tururú”
Cantaba » Uaba, uaba, uaba» y yo canté también…
No me hagas ‘uaba’ o yo te lo haré
No me hagas ‘uaba’ o yo te lo haré
El monstruo en el espejo tal vez seas tú…
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«Con» Luis Tosar, en ´O apóstolo´ >>
Los monstruos del Dr. Cine 
Muy bueno!!!!
¡Gracias!